Fuerte presión bajista en el ORO
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Análisis semanal del oro
El precio del oro cerró la semana pasada con una clara presión bajista, perdiendo nuevamente la marca clave de los 2700 y registrando mínimos en 2646. Este movimiento se vio influenciado por los ajustes en los rendimientos de los bonos estadounidenses, que siguen subiendo ante la expectativa de una Reserva Federal más restrictiva. Aunque los datos macroeconómicos en EE. UU. apuntaban a cierta debilidad, no lograron contrarrestar el impacto negativo que los bonos generan sobre el oro como activo refugio. El panorama para el oro en el mediano plazo sigue siendo complicado, ya que su comportamiento está estrechamente ligado a las decisiones de política monetaria y la evolución de los rendimientos reales.
Desde el punto de vista técnico, la estructura en el gráfico de 4 horas sigue mostrando una tendencia bajista dominante. Sin embargo, en el corto plazo podríamos ver un retroceso al alza si el precio logra superar la resistencia inmediata en 2662, con posibles objetivos en la zona de 2678-2688 antes de reanudar la caída. Por el lado de los soportes, el próximo rango clave se encuentra entre 2625 y 2605.
Solo si el oro recuperase los 2700 y lograse un cierre por encima de los 2725 indicaría un cambio estructural que permita hablar de recuperación en el precio del oro.
Mientras tanto, cualquier movimiento alcista debería ser considerado como un retroceso dentro de la estructura bajista activa.
El precio del oro cerró la semana pasada con una clara presión bajista, perdiendo nuevamente la marca clave de los 2700 y registrando mínimos en 2646. Este movimiento se vio influenciado por los ajustes en los rendimientos de los bonos estadounidenses, que siguen subiendo ante la expectativa de una Reserva Federal más restrictiva. Aunque los datos macroeconómicos en EE. UU. apuntaban a cierta debilidad, no lograron contrarrestar el impacto negativo que los bonos generan sobre el oro como activo refugio. El panorama para el oro en el mediano plazo sigue siendo complicado, ya que su comportamiento está estrechamente ligado a las decisiones de política monetaria y la evolución de los rendimientos reales.
Desde el punto de vista técnico, la estructura en el gráfico de 4 horas sigue mostrando una tendencia bajista dominante. Sin embargo, en el corto plazo podríamos ver un retroceso al alza si el precio logra superar la resistencia inmediata en 2662, con posibles objetivos en la zona de 2678-2688 antes de reanudar la caída. Por el lado de los soportes, el próximo rango clave se encuentra entre 2625 y 2605.
Solo si el oro recuperase los 2700 y lograse un cierre por encima de los 2725 indicaría un cambio estructural que permita hablar de recuperación en el precio del oro.
Mientras tanto, cualquier movimiento alcista debería ser considerado como un retroceso dentro de la estructura bajista activa.
交易开始
Si no logra romper los 2662 y consolidar por encima, el precio puede iniciar la caída desde esta resistencia. Mi idea es un retroceso mas amplio antes de caer, pero dependerá de la presión bajista ejercida.
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